Muchos
de nosotros damos como algo natural tener dos manos y usarlas. Empezamos
a valorar lo que nuestras manos representan, cuando usarlas para algo
tan simple como puede ser abrochar un botón se convierte en asunto
de gran dolor.
Manos o
dedos deformados pueden hacer que actividades rutinarias como vestirse
o lavarse los dientes se conviertan en algo difícil y doloroso.
Manos doloridas constantemente, articulaciones hinchadas o dedos deformados
pueden producir sentimientos de vulnerabilidad, vergüenza y abandono
así como complejo de inferioridad.
Los problemas con las manos pueden ir desde los aspectos mecánicos
hasta los neurológicos.
Las dos
principales causas de dolor en las manos son artritis y síndrome
del túnel carpiano, pero también gota y tendonitis pueden
impedir un funcionamiento normal de nuestras manos.
Hoy en
día una de cada tres personas adultas sufre de artritis o de
problemas crónicos en las articulaciones. Aunque existen mas
de cien tipos distintos de artritis, el tipo más común
es la osteoartritis. Además de las manos la osteoartritis suele
afectar a las rodillas, caderas, pies y espalda.
Numerosos
factores aumentan la posibilidad de tener osteoartritis. Debilidad muscular
y una historia clínica de danos y heridas causadas por
accidentes o lesiones deportivas ponen a una persona en vulnerabilidad
ante el tipo de osteoartritis llamada artritis traumática.
Actividades
repetitivas como teclear sobre una maquina (ordenador o computadora)
o sobre un instrumento musical, piano) pueden empeorar los síntomas
de artritis aun cuando no suelen producir osteoartritis.
El síndrome
carpiano es otra causa del dolor de manos. Los síntomas típicos
suelen ser: dolor, debilidad y dedos pulgares doblados o deformados.
Normalmente estos síntomas se producen durante la noche, haciéndole
a uno despertarse. Dormir con las muñeca dobladas, hábito
muy normal, ayuda a estos síntomas nocturnos. Al se, uno necesita
sacudir las manos para bajar la hinchazón.
Si la situación
empeora el dolor se transmite al brazo, haciendo difícil cerrar
el puno, agarrar pequeños objetos o hacer cualquier cosa con
las manos.
En casos
agudos y crónicos, los músculos en la base del dedo pulgar
se debilitan e incluso se pierde la habilidad para sentir al tacto el
frío y el calor. Acudir a la cirugía para solventar estos
problemas, es algo cada vez mas común. Solo en los EEUU se realizan
mas de 200.000 de estas operaciones quirúrgicas anualmente.
La ablación
por radiofrecuencia para el
tratamiento de la artritis y la artrosis
Artritis
con dolor pero sin inflamación
Artritis
en dedos de la mano - Tratamientos no quirúrgicos