Respuesta
a su pregunta de salud
Título
:
Lesión de ligamentos en el tobillo - Tratamiento
Pregunta
(formulada el 13 de Septiembre del 2011):
Tratamiento
de una lesión de ligamentos en el tobillo.
Mary
Respuesta:
Estimada
Mary,
Las lesiones
de los ligamentos del tobillo se clasifican en tres categorías,
dependiendo de la extensión del daño:
-
Grado I.
Es
una lesión sin desgarro macroscópico. No se observa inestabilidad
mecánica. El dolor y la sensibilidad de la lesión son
mínimos.
- Grado
II.
Es un desgarre
parcial. Dolor moderado y malestar están presentes. La inestabilidad
de la articulación es de leve a moderada
- Grado
III.
Es un desgarre
completo. Hay dolor severo y rigidez, e incapacidad para soportar el
peso y se observa una significativa inestabilidad de la articulación.
Los primeros
días y semanas después de producida la lesión,
el tobillo tiene que estar en descanso o reposo absoluto.
La terapia
de hielo puede ayudar a disminuir la inflamación.
Los medicamentos
antiinflamatorios pueden reducir la hinchazón y el dolor asi
como facilitar la curación.
Dependiendo
de la gravedad de la lesión y del daño, el pie y el tobillo
pueden necesitar ser inmovilizados, requiriendo o no requiriendo el
uso de muletas.
Si el daño
es mínimo, se pueden utilizar tobilleras ortopedicas.
En casos
de daño de moderado a severo, una bota removible se suele utilizar
para bloquear el tobillo y el pie.
Cuando
hay fractura, se utiliza yeso para inmovilizar el tobillo y el pie.
La terapia
física es una parte esencial del protocolo en el tratamiento
de los esguinces de tobillo.
En todos
los casos de esguinces en algún momento del tratamiento se realiza
terapia física.
A medida
que avanza el tratamiento, el paciente será trasladado a una
situación de cada vez menos inmovilidad.
Los esguinces
de tobillo no se curan de manera rápida.
Pueden
pasar varios meses hasta que el paciente vuelve a sentir fuerza en su
tobillo.
El inicio
de actividades antes de tiempo puede llevar a más esguinces,
sin que el esguince inicial haya sanado por completo.
Esto conduciría
a una inestabilidad crónica del tobillo, la cual necesitaría
ser corregida quirúrgicamente.
El tipo
de corrección quirúrgica depende de la gravedad de la
lesión en los ligamentos.
Se suele
realizar una artroscopia.
Pequeñas
incisiones en la parte frontal del tobillo permiten la introducción
de una cámara y un instrumento especial que va a "reducir"
los ligamentos y endurecerlos.
En la mayoría
de los casos de corrección quirúrgica la articulación
del tobillo tendrá que ser abierta en la zona de los ligamentos
con el fin de visualizar los propios ligamentos.
Los ligamentos
se pueden reparar colocandolos de nuevo en el hueso en su posición
anatómica.
Un pequeño
anclaje de metal se suele utilizar para fijar los ligamentos en el hueso.
Esta reparación
aprieta y fortalece los ligamentos de nuevo. En situaciones en que los
ligamentos están muy debilitados o desteriorados se utiliza un
tendón de cadáver para crear un nuevo ligamento en el
tobillo.
Dicho tendón
se enruta a través de los huesos del tobillo para reforzar el
tobillo.