Respuesta
a su pregunta de salud
Título
: Tendinitis en la pata de ganso.
Pregunta
(formulada el 14 de Febrero del 2012):
Sres.
de ABC Farma, hace más de dos meses me diagnosticaron tendinitis
en la pata de ganso.
Soy
maratonista, por lo que tuve que guardar reposo.
También
tuve que hacer rehabilitación quinesiológica.
Lamentablemente
no tengo resultados positivos, ya que los dolores vuelven cuando intento
correr
¿Cuál
es la solución?
Gracias.
Osvaldo
Respuesta:
Estimado
Osvaldo,
La pata
de ganso se compone de una combinación de inserciones tendinosas
de los músculos sartorio, semitendinoso y gracilis sobre la superficie
anteromedial (frontal e interior) de la extremidad proximal de la tibia
(extremidad superior de la tibia).
El ultrasonido es
una herramienta para la reducción de la hinchazón y el
dolor en el tratamiento de la tendinitis en la pata de ganso.
Cuando la inflamación
se produce, se recomienda descansar la zona y aplicar compresas frías
durante 10-20 minutos por lo menos 3 veces al día.
Una terapia de estimulación
del flujo sanguíneo puede ser utilizada después de que
la inflamación aguda ha mejorado.
La terapia de compresión
en frío reducirá la inflamación y la hinchazón
inicial y la terapia de estimulación del flujo sanguíneo
aumentara el flujo sanguíneo a través del área
para acelerar el proceso de curación.
La aplicación
de frio y la estimulación pueden ser reforzadas con el uso de
aplicaciones de ultrasonido sobre la zona afectada, ya que reduce la
inflamación rápidamente y aumenta el flujo sanguíneo
en la zona, ayudando a que el tendón sane más rápido.
Si la costura del
tendón es necesaria, no se debe utilizar ultrasonido hasta que
las heridas en la superficie de la piel hayan sanado.
Es recomendable
dejar pasar 60-90 minutos entre los tratamientos de terapia en frío
y terapia de ultrasonido o terapia de estimulación del flujo
sanguíneo para devolver el área a la temperatura normal
del cuerpo antes de comenzar un tratamiento diferente.
El objetivo en cualquier
lesión en el tendón es conseguir curar con formación
mínima de tejido cicatricial y con la realineación de
la mayor cantidad de fibras tendinosas posible, algo que tanto una terapia
de estimulación del flujo sanguíneo como el ultrasonido
terapéutico pueden facilitar.
Incluso con una
curación óptima siempre habrá menor elasticidad
en un tendón lesionado que la que había previamente.
A mejor curación
menor es la probabilidad de que la lesión vuelva a reproducirse
al iniciar los entrenamientos.
Para reducir esa
probabilidad la prevención debe de enfocarse en el estiramiento
de los tendones de la corva y el fortalecimiento de los cuádriceps
con el objetivo de continuar gradualmente con las actividades normales
sin provocar una recurrencia de la tendinitis.