La
investigación con células madre avanza en la búsqueda
para evitar la temida obturación del conducto dentario.
Según
los científicos los avances en el tratamiento de la caries
dental pueden conducir un día no muy lejano a la capacidad
de restaurar el tejido del diente y evitar el tratamiento
de conductos radiculares (endodoncia), durante décadas
el símbolo de la más insoportable cirugía
menor.
Varios
estudios recientes han demostrado en animales procedimientos
con células madre dentales que parece que hacen
volver a crecer el crítico tejido dental vivo conocido
como pulpa.
Los
tratamientos que incitan al cuerpo a regenerar sus propios tejidos
y órganos son conocidos genéricamente como medicina
regenerativa.
Existe
gran interés en encontrar la manera de poner en práctica
este conocimiento para ayudar a las muchas personas con caries
y enfermedades que conducen a la pérdida de dientes.
En
los países desarrollados la mitad de los niños
han tenido al menos una caries dental antes de cumplir los 15
años de edad y una cuarta parte de los adultos mayores
de 65 años han perdido todos sus dientes.
La
caries se produce cuando bacterias o infecciones abruman
el proceso natural de reparación de un diente. Si
el culpable no se reduce o se elimina, el daño puede
continuar.
Si
la infección erosiona el duro esmalte exterior y penetra
hacia abajo en el interior del diente, con el tiempo puede matar
el blando tejido de la pulpa en el interior, provocando la necesidad
de ya sea una endodoncia (tratamiento del conducto radicular)
o la eliminación del diente.
La pulpa es necesaria para detectar sensibilidad, incluyendo
el calor, el frío y la presión, y contiene
células- madre, células indiferenciadas que se
convierten en especializadas, que pueden regenerar el tejido
dental.
Investigadores
de Corea del Sur, Japón, EE.UU. y el Reino Unido han
estado trabajando en la manera de "persuadir" a
las células madre en la regeneración de la pulpa.
El
proceso se encuentra todavía en sus primeras etapas,
pero si tiene éxito, podría significar una reducción
o incluso la eliminación de la necesidad de dolorosas
endodoncias.
Algunos
científicos se han centrado en el crecimiento de los
dientes completamente nuevos. Otros se enfocan en tratar de
hacer crecer nueva pulpa sana dentro de la cáscara dura
del esmalte de los dientes, ya sea mediante la estimulación
de las células madre o alentando y controlando mejor
la inflamación que se produce en la boca, en respuesta
a una infección.
Los
investigadores también están tratando de comprender
como las células madre dentales generalmente obtienen
el mensaje del diente sobre cuando regenerar pulpa.
La
dentina, un tejido duro que protege la pulpa, es un elemento
crítico. Cuando las bacterias la descomponen, libera
moléculas que estimulan la regeneración de las
células del diente.
El
Dr. Smith de la Universidad de Birmingham y su equipo han identificado
una serie de sustancias químicas que transmiten estas
señales y están trabajando en encontrar una forma
de liberar a estos mensajeros terapéuticamente como
otra forma de reparar los dientes.