La
salud no es algo estático, es un estado dinámico
y temporal que se pierde y que se recupera.
Es
un equilibrio flexible que permite interactuar con gérmenes
y no infectarse, estar en contacto con alérgenos y no
sufrir alergias o estar expuesto a carcinógenos y no
tener cáncer.
Cuando
se pierde la salud el sistema de curación del cuerpo
se activa para intentar restablecerla.
Dicho
sistema de curación del cuerpo no es un componente estructural,
como el sistema nervioso o el sistema musculoesquelético,
sino que es un sistema funcional.
La
medicina occidental se centra más en los componentes
estructurales y la medicina oriental en los funcionales.
La
medicina china se desarrolló sin el conocimiento de la
estructura interna del cuerpo humano. En lugar de ello se concentró
en identificar funciones del cuerpo y su relación
entre ellas.
Los
médicos orientales carecían de conocimiento anatómico,
pero ello no les impedía mejorar la salud de sus pacientes.
Por
el otro lado los médicos occidentales tenían el
conocimiento de los órganos pero no tenían, hasta
recientemente, idea de para que servían algunos de ellos.
Un
ejemplo son los órganos del sistema inmunológico,
amígdalas, adenoides, nodos linfáticos, apéndice,
timo y bazo.
Durante
buena parte del siglo XX la mayoría de estos órganos
se consideraban sin función alguna, vestigiales
(como resto de algo) o sin importancia.
En
la década de los 60 era normal que muchos cirujanos extirparan
amígdalas y adenoides a niños que tenían
frecuentes episodios de amigdalitis, y hasta hace pocos años
pacientes que entraban en un hospital para una extirpación
de vesícula o una histerectomía (extracción
del útero) se enteraban al salid del hospital que sin
su conocimiento ni su autorización les habían
extirpado el apéndice.
Hay
una gran diferencia entre la visión estructural
del cuerpo y la funcional.
Los
estructuralistas de la medicina occidental destruyen
órganos del sistema inmune sin darle importancia y los
funcionalistas de la medicina oriental desarrollan métodos
para que funcionen mejor.