La
canela se ha utilizado como especia y como medicina herbal tradicional
desde hace siglos.
Las
pruebas existentes en vitro y en animales en vivo sugieren que
la canela tiene propiedades antiinflamatorias, antimicrobianas,
antioxidantes, antitumorales, cardiovasculares, reductoras del
colesterol, y efectos inmunomoduladores (capacidad para alterar
o regular una o más funciones inmunes).
Los
estudios in vitro han demostrado que la canela puede actuar
como un mimético de la insulina, para potenciar la actividad
de la insulina o para estimular el metabolismo celular de la
glucosa.
Por
otra parte, estudios en animales han demostrado fuertes propiedades
hipoglucemiantes (reducción de los niveles de azúcar
en la sangre)
Sin
embargo, solo hay unos pocos estudios clínicos bien controlados,
hecho que limita las conclusiones que se pueden sacar sobre
los beneficios potenciales de la canela para la salud de los
seres humanos.
El
uso de la canela como un complemento al tratamiento de la diabetes
mellitus tipo 2 es el área más prometedora, pero
se necesita investigación adicional antes de que se puedan
ofrecer recomendaciones definitivas.