Prevenir la obesidad.
Marzo
2014 | Boletin
Mensual de Nutrición
Título
del estudio:
La
ontogenia de las preferencias gustativas: biología básica
y las implicaciones para la salud.
Estudio
publicado por primera vez el 22 de enero del 2014 en el American Journal
of Clinical Nutrition.
Autora
del estudio:
Julie
A Mennella
Del
Centro de Sentidos Químicos Monell, Filadelfia, Pensilvania.
Resumen
del estudio:
Las iniciativas
de salud se enfocan en el problema de la obesidad infantil tratando
de fomentar una buena nutrición temprana en la infancia.
Esta revisión
destaca la ciencia que demuestra que los niños de manera natural
prefieren niveles más altos de sabores dulces y salados y rechazan
más los niveles bajos de sabores amargos que los adultos.
Su biología
básica no les predispone a decantarse por las recomendadas dietas
bajas en azúcar, bajas en sodio y ricas en vegetales y dicha
biología básica los hace especialmente vulnerables a nuestro
entorno actual alimentario de alimentos ricos en azúcares refinados
y en sal.
No obstante
hay que tener presente que las experiencias sensoriales, iniciadas tempranamente
en la infancia, pueden modificar las preferencias.
Las madres
que consumen dietas ricas en alimentos saludables pueden lograr de los
niños un buen comienzo porque los sabores se transmiten de la
dieta materna al líquido amniótico y a la leche materna
y los bebés amamantados tienen más aceptación de
estos sabores.
En contraste,
los bebés alimentados con fórmula aprenden a preferir
su perfil de sabor único y pueden tener más dificultades
para aceptar inicialmente sabores que no se encuentra en la fórmula,
tales como los de las frutas y verduras.
Independientemente
del modo de alimentación temprana, los bebés pueden aprender
a través de una exposición repetida a una variada dieta
si sus madres se centran más en el deseo del niño en consumir
una determinada comida que en las expresiones faciales que el niño
hace mientras come.
Además,
proveer alimentos complementarios bajo en sal y azúcar puede
ayudar a proteger a un niño en desarrollo contra el consumo excesivo
en el futuro.
Experiencias
de vida temprana con gustos y sabores saludables pueden recorrer el
largo camino hacia la promoción de una alimentación sana,
algo que podría tener un impacto significativo en el tratamiento
de las muchas enfermedades crónicas asociadas con la errónea
elección de alimentos.
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