La
cúrcuma, una especia de color amarillo brillante más
conocida como un ingrediente del curry, está ganando
interés científico como una alternativa natural
a los medicamentos para la artritis.
La
curcumina, un compuesto químico orgánico que le
da la cúrcuma su color amarillo, ha demostrado en dos
estudios recientes ser beneficiosa para los pacientes
con artritis, al menos tan beneficiosa como los comúnmente
utilizados los fármacos antiinflamatorios, los cuales
pueden dañar el hígado y aumentar el riesgo de
hemorragia gastrointestinal, enfermedades del corazón
y accidente cerebrovascular.
Los
científicos indican que los estudios - uno de los cuales
está financiado por una empresa que vende curcumina-
son preliminares y estudios de mayor tamaño y mejor diseñados
son necesarios.
Los
estudios fueron realizados, uno en el Departamento de Epigenética
e Investigación del Cáncer en el Medical Center
de la Baylor University en Dallas, y el otro por la comercializadora
Arjuna Extractos Naturales SA en Kerala, India
Algunos
especialistas en artritis se muestran escépticos.
Los
estudios indicados sobre la curcumina en el tratamiento de la
artritis tiene un gran defecto: Ninguno incluyó un placebo,
o grupo de control, indica el reumatólogo David Felson,
quien dirige un equipo de investigación sobre la artritis
en la Boston University School of Medicine.
El
doctor Felson añade que los pacientes tienden a inscribirse
en los ensayos clínicos cuando la artritis se encuentra
en su punto más doloroso, y por lo cual la mejora
en ese ensayo clínico puede ser simplemente una mejora
aleatoria en el tiempo.
El
Dr. Goel, co-autor del estudio de marzo en la Baylor University
en Dallas, está de acuerdo en que la inclusión
de un placebo "habría sido mejor", pero menciona
que su estudio era un preliminar esencial para ensayos
clínicos más grandes.